27 enero 2009

Echar el tiempo atrás

Hoy es un día en que quisiera echar el tiempo atrásme encantaría borrar mis errores y tratar de tomarte de las manos.
Quisiera poder abrazarte y sentir tus labios como si nada mas existiera, como si la distancia nunca se hubiese entrometido.

Sería mágico caminar sobre mis pasos y desvanecer unas cuantas huellas,dejar atrás los tropiezos y caídaspara tan solo sacudirme el polvo del camino.

Ojala existiera esa magia para poder acercarme a ticomo si nada mas pasara en mi vida.

Ángel o Bruja

Miércoles por la mañana, siento el calor del sol sobre mi frente y me obliga a girar la cabeza hasta esconderme de sus rayos para permanecer un minuto más en ese sueño.
La noche anterior parecía hablar con alguien nuevo en mi vida pero con una mirada de antaño, una mirada que no me es ajena, donde encuentro reflejados sueños, ilusiones, tristezas pero sobre todo un escudo que la aleja del miedo, de la decepción y sin quererlo a su vez del amor.
Aun no se en que parte la conversación se convirtió en una historia que solo al cerrar los ojos podía ver, entre las nubes y las estrellas, desde un punto alejado en el cielo.
Parecía encontrar un lugar escondido, que todos conocían pero nadie podía encontrar, donde una mujer bella y de corazón noble, decía ser una bruja mala, del tipo que sin corazón dañan a aquel que intenta conocer sus secretos y conjuros con los cuales encanta a los que miran sus bellos ojos.
Tal vez no se ha dado cuenta que no hace falta esconderse, ni llamarse bruja, es suficiente con darse cuenta de que tiene miedo de amar, miedo de que alguien no sea lo que ella merece por ser tan grande.
Ante esta historia de brujas con alma de Ángeles solo puedo abrir los ojos cada día para pronunciar un texto que a cada paso recuerdo:
“ si tan solo pudiera encontrar esa escondida cabaña , donde has puesto tu corazón en un cofre del cual la llave se ah perdido, tal vez conocería un poco de la maravillosa creación que Dios envió a la tierra con el nombre de mujer.
Dice la historia que Dios estaba creando al ángel perfecto para enviarlo a la tierra y que fuera la guía de todo hombre, en eso otro ser cegado por la envidia reclamo a Dios que porque lo llamaba perfecto si lloraba, si podía ser lastimado y siempre ser capaz de amar, a lo que Dios respondió, esa es su perfección ,el amor a pesar del dolor, el amor a pesar de todo, y su delicadeza para demostrarlo”

“aquel ángel llamado mujer que ningún hombre puede poseer por su grandeza de corazón”

21 enero 2009

Una amante tierna y romántica

Ayer abrí los ojos después de un largo descanso y al fijar la mirada, me encontré en un lugar nuevo, un lugar desconocido para mi.
Poco a poco, mientras caminaba por ahí, encontraba las huellas del pasado en el camino.
Por un momento tropecé con una roca y al siguiente todo estaba despejado, mientras alzaba la mirada, pude notar una luz que parecía lejana, una llama calida que iluminaba mi camino.
Paso a paso, mientras caminaba hasta ese encuentro donde poco a poco sentía una paz inexplicable, me encontré una mirada en el camino, unos ojos que reflejaban un poco de tu ser. Tan solo me mostraban una pequeña parte de la inmensidad de emociones escondidas en esa mirada de amor y de ilusión.
Entre las luces tenues pude escuchar tu voz y me perdí en el susurro de tus labios, de esos labios de mar que me alejan de los días amargos del pasado.
Esos labios que guardan un silencio de hace años, cuando eran jóvenes e inexpertos, esos días en que con mas inocencia que un ángel, podían decir un te quiero aun sin entenderlo.
Hoy han pasado 20 años desde aquel curioso día en que te conocí, 20 años de experiencias, sinsabores y alegrías, en que cada uno por su parte encontró palabras y soledades que forjaron corazones remendados por caricias.
Esas caricias que con el tiempo han madurado y hoy yacen aquí, a nuestro lado, uniendo dos almas que desde pequeñas se han acompañado, sin apartarse, sin dejarse en el pasado.
La hora de dormir ha llegado nuevamente, quizá sin darme cuenta esto ha sido solo un sueño, un bello sueño donde encontré el beso y las palabras que hace tanto yo buscaba, que han nacido entre dolores y alegrías de una boca anhelada por mi mente.
Una boca que día con día me envenena y llena de pasión mis venas, que en cada palabra altera mi mente y en cada sonrisa ilusiona mi alma, esa boca que encuentro por la noche y que a cada instante me recuerda el sabor de tus suspiros.
Hoy me doy cuenta que quizá entre sueños he encontrado a esa persona, que con su sonrisa enciende el sol a cada instante. Esa persona que con su palabra calma la tormenta que hay en mí. Que es tan grande para provocar suspiros, pérdidas de aliento que traen su recuerdo hasta mi vida, para poder despertar mañana, para soñar despierto una vez más.
Quizá hoy sueño con este amor de verdad, entiendo que más tarde podría despertar y darme cuenta que no estas aquí, mientras tanto quisiera abrazarte y no soltarte jamás, para mantener a esta amante tierna que entre besos me permite suspirar.

Te digo adiós

Te digo adiós porque te necesito,
porque quiero vivirte plenamente
vivirte sin desconfianzas y sin temores.
Desearía tenerte a mi lado,
poder besarte y decir te amo
que no puedo estar con nadie diferente a ti
hoy tal vez puedo relacionarme,
más no puedo comprender a otro corazón.
Te lo digo porque quiero vivir a tu lado
pasar cada noche frente a tu cuerpo
y despertar bajo tu aroma de ternura.
Quisiera poder estar junto a ti
despertar con un buenos días y un te quiero
y descansar bajo la luna y el roce de tu piel.

Es solo que ayer se oculto el arco iris
y no pude retenerte a mi lado,
quizá hoy solo me queda decirte adiós.

Un adiós que se lleva todo lo que necesito
que ha guardado tu recuerdo en un cajón
que se ha impregnado en mi guitarra
y en la voz que tiembla al desprenderme de ti.

Un día lluvioso...

Al primer suspiro de la mañana, pude sentir el aroma de la lluvia que tocaba mi ventana, abriendo los ojos poco a poco encontré la niebla matutina que opacaba la visión hacia la gente.
Al caminar por el jardín pude ver una rosa bañada de rocío y un recuerdo que descansaba entre las hojas.

Pensé que más tarde esa nube partiría, alejaría el agua de mi vida y de cierta manera esperaba el nacimiento de un sol nuevo que iluminara mi sonrisa.
Fue pasando el tiempo mientras el aire fresco daba vida a mi camino, mientras el agua fría lavaba mi corazón.
Llegó la tarde y con ella encontré tu mirada en el pasado, con una caricia que parecía eterna y un te quiero encarnado entre mi voz.
Hoy el agua sigue cayendo sobre mí, limpiando tu recuerdo, alimentando mi sed y aclarando mi camino para encontrar una morada nueva, un nuevo resplandor.